Cuento: Insultos modernos

"¡Pero que flor de pelotu"# que sos!" Me gritó un colectivero que tuvo que frenar para no atropellarme mientras que cruzaba la calle cuando el semaforo me lo permitía.
Curiosamente la noche anterior, una chica vestida con poca ropa para una ciudad (apropiada para una pileta o la playa, diría), me dijo: "¡sos un recontra bolu"#!" cuando yo estaba sentado en un bar tomando un vaso de vino calmadamente (se ve que estuve mucho tiempo allí y esa chica quería sentarse en el lugar donde estaba sentado, porque cada 1 minuto intentaba sentarse encima mío y yo me corría mas y mas cada vez para dejarle ese lugar).

Me quedé pensando entonces en los insultos de hoy en día.
Insultos del pasado como hijo de p... y la con"#$ de tu madre/hermana, han pasado a ser mas que meros adjetivos calificativos.

Hace unos años, palabras como las anteriores herían sensibilidades al receptor. Tiempo despues, esas mismas palabras ya no tienen el impacto que tenían antes.

Mi teoría es por su sobreutilización.
Al usar tanto una palabra, esta tiene un efecto de desgaste en la forma en que se recepciona e incluso a veces es tomada como un cumplido: "¡Sos un bolu"#! te pasaste con el regalo, no hacía falta".

Entonces...no sería conveniente dejar de utilizar estos insultos por lo menos por una generación y ¿cambiarlos por otros? De esta forma nosotros tendríamos nuevamente palabras que hieren sensibilidades con un fuerte impacto y nuestros hijos o nietos podrán utilizar nuestros viejos insultos como insultos retro o vintage, logrando mayor fuerza que nosotros en este momento al utilizarlos.

La pregunta radica en como crear nuevos insultos...
Siguiendo el consejo que me dió Jesus el mes pasado, revisé la tabla periodica y noté algo curioso.
Los elementos se denominan con una o mas letra. Por ejemplo, el potasio con la letra K, el hidrogeno con la letra H y así todos...

Entonces, mezclando los nombres de los elementos quimicos, podemos formar palabras.
Sería muy dificil crear oraciones, pero util para crear palabras cortas para ser utilizadas como insultos.

¡Uy, que emoción! Viendo la tabla periodica ya se me ocurren algunos.

Por ejemplo, el Hierro se escribe Fe y el oxigeno O.
Entonces podemos decirle a nuestro mayor enemigo: "¡Sos un óxido de hierro!" (O sea, FeO).
Les aseguro que no hay nada mas gracioso que ver la cara del que detestamos en completa confusión mientras que intenta decifrar lo que le acabamos de decir

A continuación les dejo algunos mas de los que se me ocurrieron:

"Sos un doble óxido de boro" (O sea, BOBO).
"Sos un óxido de yodo carbonico con neón" (O sea, NeCIO)